El comisionado habló de unas pérdidas del 33% de los ingresos y de los problemas para que los Raptors regresen ya a Toronto.
Como es tradición, el comisionado Adam Silver compareció ante los medios de comunicación antes del inicio de las Finales de la NBA, en esta edición de 2021 después de una temporada marcada, como la pasada, por la adaptación a la obligación de jugar en tiempos de pandemia, con un calendario polémico y comprimido; muchas lesiones, menos ingresos y muchas dudas por resolver en ruta hacia una temporada 2021-22 en la que se planifica un regreso casi pleno a la normalidad. También en cuanto a fechas y estructura.
Silver dejó algunas afirmaciones muy significativas, empezando por su satisfacción con un formato play in que, aunque necesitará la aprobación de franquicias y jugadores (NBPA), parece que ha llegado para quedarse: “Creo que lo seguiremos teniendo la próxima temporada“, dijo un Silver que también habló con franqueza de la exigencia que ha supuesto una temporada con menos descanso del habitual, más lesiones y un calendario comprimido con 72 partidos (y no los 82 habituales) por equipo: “No tengo duda de que el estrés y la exigencias física y mental de esta temporada ha contribuido a que haya habido lesiones. Pero no sabemos exactamente por qué ha sido así, es algo que seguiremos estudiando cuando acabe la temporada. Hemos visto cada día la enorme exigencia física y emocional que ha acarreado esta temporada en todo el mundo. Pero sigo pensando que, con todos los factores en la balanza, esta era la mejor de varias posibles soluciones que no eran a priori muy populares. Acepto las críticas, es parte de mi trabajo, vengan de los jugadores, los medios de comunicación u otros sitios. Veremos, tal vez necesitemos años para saber de verdad qué hemos hecho bien y qué hemos hecho mal“.
Así que, ¿cómo será la temporada 2021-22? Silver tiene claro que se hará todo lo posible para mantener el play in y aseguró otra vez que no habrá amistosos fuera de Estados Unidos, algo que la NBA quiere recuperar para el anticipo de la temporada 2022-23. El deseo es también volver al calendario de 82 partidos por franquicia y a un arranque más normal, en el mes de octubre. Una forma de regresar a la deseada normalidad después de acumular una caída del 33% en los ingresos, algo mejor del 40% que se esperaba antes del inicio de curso gracias a la reapertura de los pabellones, que pasaron a funcionar en capacidades totales o casi totales en estos playoffs: “Desde un punto de vista financiero las cosas han ido mejor de lo previsto. Como ya he explicado, más o menos el 40% de nuestros ingresos tradicionales tienen que ver con la venta de entradas y lo que genera tener aficionados en los pabellones. Poder tenerlos de vuelta en los playoffs nos ha podido llevar, aunque todavía no tenemos cifras exactas, a unas pérdidas de una tercera parte (33%) de esos ingresos, no el 40% que esperábamos. Es obvio que se han acumulado pérdidas importantes en estas dos últimas temporadas, pero no me voy a quejar. Esta fase, y hablo por los propietarios, se ve como una inversión a largo plazo, necesaria para mantener las organizaciones en marcha. Y quiero recordar que los jugadores han compartido los sacrificios en la parte que les ha tocado de sus salarios”.
Para esa próxima temporada, se contaba con el regreso de los Raptors a Toronto tras su año de exilio en Tampa, un trance obligado por las restricciones de movilidad impuestas por la COVID. Sin embargo, esa vuelta no está asegurada todavía ni mucho menos: “Ahora mismo no está claro. Pero sé que la franquicia espera que Ontario abra sus puertas y pueda regresar a Toronto“.
El comisionado también se refirió a que siga sin haber una mujer como entrenadora principal, a pesar de los constantes rumores que rodean a Becky Hammon, ayudante de Gregg Popovich en los Spurs, algo que definió como “frustrante”. Y no anticipó una expansión en el corto plazo a pesar de los rumores que hablan de una NBA de 32 franquicias con el regreso de Seattle y la llegada de una nueva ciudad con Las Vegas como constante favorita: “Sé que se ha dicho que estamos mirando con seriedad esa opción por la reducción en los ingresos, pero no es exactamente así. Una expansión es un proceso de años, no se trata de que como hemos perdido un 40% de nuestros ingresos por la pandemia podemos generar ese dinero rápidamente con una expansión. De hecho, no creemos que sea algo que hay que hacer en plena pandemia, aunque desde luego está sobre la mesa. Habrá un momento en el que tendrá sentido, pero no es algo que esté destacado en nuestra agenda ahora mismo“.